La consulta, como me diría una paciente y amiga es....un lugar de paz, de apoyo, de escucha. Sus palabras describieron aquello que espero sienta cada persona a quien cuido: " al salir de tu consulta sentí como si saliera de un spa"
Y es que durante una sesión cuya duración puede variar entre 1 a 2 horas, el paciente puede expresar, sentir, vivir, gritar si es necesario, llorar y desnudar su alma, su corazón para re-conocer su verdadero ser, aquello que habita en su profundo sentido de vida.La historia clínica como la conocemos es un registro que nos permite ir anotando aquello que consideramos nos será de apoyo para darle un seguimiento al ser que está frente a nosotros.Pero esa historia, guardada por años, meses y/o días, tiene todos los matices, los colores, las emociones de quien las vive.
En ella encontraremos datos no solo de su vida, sus recuerdos, sus enfermedades, cirugías, traumas, alergias entre otros, sino información que puede llegar hasta sus ancestros, su árbol genealógico, un lugar donde habitan las creencias profundas, trasmitidas por generaciones a través del tiempo...
"El paciente necesita sentir nuestro acompañamiento, el contacto de nuestra mano más que la sensación fría del fonendoscopio, necesita nuestro acercamiento humano", junto con los conocimientos con lo mejor de nosotros para apoyarle en lo que necesite. Necesita nuestro tiempo, nuestra escucha, nuestro ser.Dra. Nathalie Marulanda - Especialista en Medicina Integrativa
Referencias
Cuidados paliativos, organización médica colegial
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